Descripción
Fue construido a principios del siglo XIV por orden del rey Jaime II de Mallorca. Se encuentra sobre un monte de 112 metros sobre el nivel del mar, en una zona rodeada de bosque, desde donde se puede contemplar la ciudad, el puerto, la sierra de Tramuntana y el Pla de Mallorca; de hecho, su nombre viene del catalán antiguo bell veer, que significa «bella vista». Una de sus peculiaridades es que se trata de uno de los pocos castillos de toda Europa de planta circular, siendo el más antiguo de estos. Actualmente pertenece al Ayuntamiento de Palma, y en él se encuentra el Museo de Historia de la ciudad de Palma, por lo que está abierto al público.
El diseño de planta circular con torres también circulares adosadas parece provenir del conjunto superior del Herodión (en Cisjordania), también circular y con una gran torre maestra y tres torres menores. Las torres menores están adosadas y la del homenaje está atravesada por un muro por lo que está adosada. Este edificio tampoco tiene un pórtico en el patio. A su vez, el castillo de Bellver inspiró el de Michelstetten que, aunque no tiene torres, sí cuenta con una galería superpuesta en el patio con arcos muy rebajados y columnas de planta circular.
Una vez construido el castillo de Bellver, debido a la introducción de la artillería, desaparecieron las almenas de la terraza superior y de la barbacana, y algo más tarde, de todas las torres. Se construyeron troneras en el revellín y la barbacana, cambiando el punto de acceso al revellín. En 1713, durante la guerra de Sucesión, se construyó un estrado cubierto actualmente en mal estado de conservación, invadido por pinar o ajardinado en la entrada, a pesar de su valor histórico.